Cómo solucionaría Putin la crisis norcoreana de una vez por todas

El pragmático presidente de Rusia, Vladímir Putin, podría ser la persona llamada a solucionar la crisis de Corea del Norte, informa el medio The Market Mogul. Según la publicación, Putin es la mejor opción, puesto que goza de muchas habilidades, en particular su dedicación al concepto de 'realpolitik'.

El mundo entra de nuevo en la época de la 'realpolitik' —política pragmática—. Según el medio, esto se va haciendo más evidente a medida que las cuestiones del nacionalismo económico y de la seguridad acumulan cada vez más peso en el orden del día, en comparación con las ideas de la globalización liberal, que se han propagado por el mundo desde la caída del Muro de Berlín en 1989.

Igual que en los tiempos en que el pragmatismo era uno de los conceptos principales en la política, como en la época de Otto von Bismarck o Henry Kissinger, las aristas en la personalidad de los líderes mundiales han desempeñado un papel crucial en el proceso político.

Por ejemplo, en la era contemporánea, la canciller germana, Angela Merkel, trata de vincular la idea de la Unión Europea a la influencia creciente de Alemania, y al mismo tiempo, defiende los intereses económicos de Europa en un mundo multipolar.

Entretanto, el presidente chino, Xi Jinping, trata de articular una política de 'potencia mundial' que combine con el alza económica que experimenta su país. Estados Unidos, a su vez, atraviesa un periodo de nacionalismo económico y populismo, que, al parecer, tendría como objetivo disfrazar su declive. El mandatario de EEUU, Donald Trump, busca remontarse a los tiempos del 'aislacionismo agresivo'.

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El artículo subraya que el mandatario ruso forma parte sin duda de esta lista de políticos pragmáticos. Putin empezó su carrera en los años 70 del siglo XX, cuando las ideas de la 'realpolitik' estaban muy en boga. En este sentido, ahora que el mundo corre un mayor peligro, Putin podría ser la persona adecuada para solucionar la crisis norcoreana.

La escalada de tensión en Corea del Norte se ha convertido en el 'punto caliente' de la geopolítica mundial. El artículo de The Market Mogul apunta que las palabras de Putin de que la gente en Pyongyang "preferiría comer hierba antes que renunciar a su programa nuclear" acapararon toda la atención. La razón de esta atención estriba en que las sanciones han acreditado repetidamente su ineficacia.

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El Departamento de Estado de EEUU acusó recientemente a Rusia de mantener el comercio clandestino con Pyongyang pese al hecho de que Moscú hubiera apoyado las sanciones de la ONU contra Corea del Norte.

El Kremlin entiende bastante bien la situación a causa de su cercanía con la región. Por ejemplo, China está acostumbrada a cooperar con Rusia en el campo de la política exterior. El artículo enfatiza que Putin mantiene un diálogo fluido con Xi Jinping, quien puede desempeñar también un papel importante en la solución al problema con Pyongyang.

"Si la 'realpolitik' es un concepto pertinente, Putin puede recibir el mandato para solucionar esta crisis. Es un trabajo sucio, pero alguien debe hacerlo", concluye el el medio.