"Luego de que (EEUU y Corea del Sur) ignoraron nuestras advertencias de que tenían que tomar la decisión correcta y organizaron una provocación militar peligrosa, no podrán librarse de una respuesta y un castigo implacables", indica un comunicado divulgado por el mando norcoreano.
"EEUU no debe olvidar que nuestro potencial militar está a la espera del lanzamiento [de los misiles]", aseveraron los militares.
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"La responsabilidad por las consecuencias devastadoras que provoquen las maniobras militares recae por completo en EEUU, que eligió la vía de la confrontación militar con nosotros", señala el documento.
En las maniobras Ulchi Freedom Guardian que comenzaron 21 de agosto y se extenderán durante 10 días participan alrededor de 50.000 militares surcoreanos y 17.500 estadounidenses.
Según las declaraciones oficiales estos ejercicios tienen un carácter exclusivamente defensivo por medio del modelado digital de las acciones para "incrementar la preparación combativa, la defensa de la seguridad regional y la estabilidad en la península coreana".
