Los presidentes de Rusia y Filipinas, Vladímir Putin y Rodrigo Duterte, durante la visita del mandatario filipino a Moscú de mayo pasado acordaron intensificar la cooperación bilateral.
"Podríamos cooperar en materia de energía nuclear, estamos estudiando la posibilidad de incluirla en nuestro programa energético, tenemos la planta de Bataan que fue construida pero no se puso en explotación", reveló Collinson, quien forma parte de una delegación de embajadores ante el OIEA que está recorriendo plantas atómicas de la provincia rusa de San Petersburgo.
También señaló que la economía de su país registra un veloz crecimiento, por lo que necesitará más energía para cubrir sus necesidades.
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Antes de tomar la decisión de desarrollar su propia energía atómica, Filipinas debe estudiar la experiencia de diversos Estados, resumió Collinson agregando que Rusia tiene "tecnologías muy buenas y altos estándares de seguridad en la energía nuclear".