Se precisa que 28 personas quedaron sepultadas bajo los escombros tras deslaves, 13 fueron arrastradas por riadas, 22 fallecieron al derrumbarse edificios, cuatro murieron ahogadas y otras 16 perdieron la vida o desaparecieron por otras causas.
Las lluvias torrenciales que azotan la región desde el 22 de junio afectaron a más de 12 millones de personas, destruyeron 53.000 edificios y dañaron unos 350.000, destaca el medio.
Como consecuencia, más de 1,6 millones de personas fueron evacuadas y cerca de 470.000 necesitan asistencia urgente.
Unos 52.000 soldados, agentes de policía y efectivos de emergencias fueron movilizados para las operaciones de rescate que se llevan a cabo en la zona.