El deslizamiento más grave, con al menos 24 muertos confirmados y un centenar de desaparecidos, ocurrió el sábado por la mañana en Xinmo, una aldea montañosa situada del condado de Maoxian, en la provincia de Sichuan.
Un ejecutivo de la Cruz Roja de China, Gwen Pang, dijo que el desastre fue repentino.
"La tarea más importante ahora es continuar la búsqueda de sobrevivientes hasta que se agoten todas las posibilidades", declaró Pang.
El corrimiento de tierra en Xinmo habría descargado sobre el poblado unos 18 millones de metros cúbicos desde una altura de 1.600 metros, y sepultado 62 casas, la mitad de todas.
Mientras, los partes meteorológicos prevén que las fuertes lluvias continuarán en los próximos días en todo el país, por lo que el riesgo de nuevas inundaciones y deslaves sigue siendo alto.