La última vez que el monte Paektu, ubicado en la frontera entre Corea del Norte y China, entró en erupción fue en el año 969. En aquella ocasión, la explosión del volcán causó cambios climáticos significativos, especialmente en China, afectando además a la fauna y la flora alrededor del volcán en un radio de 120 kilómetros. No en vano, este fenómeno fue considerado como 'la explosión del milenio'.
Uno de los cambios causados por aquella erupción fue la propagación de dióxido de azufre en la atmósfera, que al oxidarse generó una serie de gases sulfúricos, que cubrieron la atmósfera terrestre, obstruyendo la entrada de los rayos del sol y reduciendo la temperatura en la Tierra.
¿Qué ocurriría si el supervolcán de Yellowstone entra en erupción? ¿Apocalipsis? https://t.co/e5eBY0uwdN pic.twitter.com/ZsJBOz4DIi
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 26 de septiembre de 2016
Científicos de Corea del Norte, China, EEUU y el Reino Unido han logrado calcular la cantidad de dióxido de azufre expulsado por el volcán, luego de analizar piedras y cristales volcánicos. En ese sentido, los expertos creen que una explosión del Paektu podría causar un invierno volcánico, con temperaturas bajas, nieves y heladas.
Las investigaciones empezaron en el año 2000, cuando se registraron movimientos sísmicos y deformaciones en zonas aledañas al volcán. Aunque la actividad en el monte Paektu se ha estabilizado, el miedo a una explosión que pueda tener consecuencias mundiales sigue vigente.