"El sobrevuelo pone de relieve la estrecha cooperación entre las fuerzas militares de Estados Unidos y la República de Corea, que se mantienen dispuestas a responder en todo momento a las amenazas a la estabilidad y la seguridad", señaló USFK en un comunicado.
El comandante de esta fuerza, general Vicente Brooks, resaltó que la reciente prueba nuclear de Corea del Norte, ya la quinta desde 2006, "es una escalada peligrosa y representa una amenaza inaceptable".
"Estados Unidos mantiene un compromiso inquebrantable para defender a sus aliados en la región y tomará las medidas necesarias para hacerlo, incluyendo operaciones como la de hoy, y el despliegue de la batería THAAD en la península coreana", dijo.
Los bombarderos estratégicos B-1 Lancer, emplazados en Guam, son aviones supersónicos con cuatro motores de propulsión a chorro y alas de geometría variable. Son capaces de alcanzar la velocidad máxima de Mach 2.