El grupo de 12 camareras y un gerente, que trabajaban en un restaurante norcoreano en la ciudad china de Ningbo, provincia de Zheijian, llegó a Corea del Sur el 7 de abril a través de Tailandia y Laos.
"Los empleados se reintegraron en la sociedad al finalizar el proceso de investigación", dijo a la agencia Yonhap una fuente del Gobierno.
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur rechazó las acusaciones.
Mientras tanto, la cadena estadounidense CNN publicó una entrevista con otras siete camareras del restaurante, que acusaban a las autoridades de Corea del Sur de organizar la fuga de las camareras.
Según el medio, el director del restaurante informó a las camareras que iban a ser trasladadas a otro local en el sureste asiático, y después fueron enviadas a Seúl, lo que fue presentado como una fuga.
Después los ciudadanos norcoreanos son enviados a los centros de residencia temporal para asistir a un curso de adaptación a la vida en Corea del Sur.