Aunque Daljinder es seguramente una de las madres más ancianas, su edad exacta se desconoce. Dice que tiene alrededor de 70 años, pero no tiene certificado de nacimiento, algo no poco común en India.
"Ella ha dicho que es cinco o siete años más joven que su marido, y el certificado de nacimiento del hombre indica que nació en el año 1937", ha explicado el médico.
El nacimiento del bebé, al que han llamado Armán, el pasado 19 de abril, ha provocado una polémica bioética. Un consejo médico está tratando de aprobar una ley que prohíba los tratamientos de fertilidad para las mujeres de más de 50 años en India, invocando motivos de salud.
El experto en fertilidad, Sunil Jindal, también ha planteado algunas dudas sobre los posibles problemas de salud para la madre.
"El simple hecho de que una mujer de 70 años tenga que soportar el peso de un niño en su vientre durante 9 meses es estresante”, ha opinado Jindal.
Además, lo que preocupa tanto a los médicos como a las autoridades indias, que no permiten la adopción después de 45 años, es el futuro de un bebé nacido en una familia de ancianos.
"Entonces surge la pregunta de cómo los padres van a cuidar al bebé. Esa es también una tarea difícil”, ha comentado el especialista.
Kaur ha afirmado que ella y su marido, que es un agricultor, habían estado a punto de perder la esperanza de tener su propio hijo y se habían enfrentado a las burlas en un país donde la infertilidad se suele percibir como una maldición de Dios.
"Dios oyó nuestras oraciones. Mi vida es ahora completa ", ha dicho Kaur a AFP desde la norteña ciudad de Amritsar. "Cuido al bebé en todo por mí misma. Me siento tan llena de energía. Mi marido también es muy cuidadoso y me ayuda en todo lo que puede”.
Kaur y Gill habían sufrido varios reveses en su búsqueda de la paternidad y anteriormente habían sido incapaces de pagar el tratamiento.
Además, habían tenido problemas familiares: en India una persona que es estéril no puede heredar tierra o cualquier propiedad de sus padres, por lo tanto Gill tuvo que llevar a sus parientes a los tribunales para defender sus derechos.
"Él ganó, y luego obtuvo este pedazo de tierra y consiguió el dinero para el tratamiento”, ha explicado Bishnoi.
En cuanto a cómo la pareja podría hacer frente a los problemas mencionados, el médico ha comentado que los padres primerizos tienen parientes que están listos para ayudar en el cuidado del bebé si fuera necesario. Además, a cualquier persona se le puede hacer tutor legal.
"La reproducción es un derecho fundamental. El gobierno no puede impedirlo", ha concluido Bishnoi.
