El experto indica que "previamente ha habido vídeos de niños árabes y centroasiáticos, ahora está claro que (el EI) apunta al Sudeste Asiático en busca de apoyo".
El nuevo vídeo, publicado el fin de semana, es el primero que muestra a niños de la región en proceso de adiestramiento para el EI en cuyas filas, según las estimaciones, luchan unos 500 combatientes del Sudeste Asiático.
"Quieren encontrar apoyo financiero, atraer a indonesios y malasios para que emigren al califato", señala Robi Sufara, del centro de investigación Barometer Institute.
La semana pasada, Turquía informó de la detención de 16 indonesios que intentaban cruzar a Siria. Anteriormente, la policía de Malasia identificó a dos nacionales de este país en un vídeo con escenas de decapitación.
El presidente de la Asociación China de Malasia y actual ministro de Transporte, Liow Tiong Lai, citado por el diario The Star, ha pedido a todos los malasios "manifestar moderación y rechazar extremismo para ayudar a frenar la proliferación de la propaganda del EI".
En Malasia han sido detenidos hasta la fecha 68 nacionales sospechosos de tener vínculos con el EI.
El ministro de Defensa malasio, Hishammuddin Hussein, ha declarado este martes tras reunirse con sus colegas de la ASEAN (Birmania, Brunéi, Camboya, Filipinas, Laos, Malasia, Singapur y Tailandia) que "el EI es una amenaza que no puede tomarse a la ligera".
Los países miembros, ha dicho, coinciden en la necesidad de "aunar los esfuerzos para combatir esta amenaza grave intercambiando datos de inteligencia y vigilando los programas y el desarrollo del EI".
Hasta 30.000 combatientes, según la CIA, luchan en las filas del EI que proclamó un califato en amplios territorios de Siria e Irak.