"Latam mantendrá la continuidad de sus vuelos sin afectar la operación, y se encuentra preparada para enfrentar esta situación y minimizar el impacto en la experiencia de viaje de sus pasajeros", informó la compañía a través de un comunicado.
Si bien los pasajeros temían que esta situación pudiese afectar el horario de sus vuelos, la jornada de este 7 de diciembre se desarrolló con normalidad.
Los trabajadores del sindicato han señalado que esperan reunirse con autoridades de la compañía, y no han dado cifras del porcentaje de adhesión que ha tenido la paralización.
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Esta huelga se suma a la realizada en abril de este año por unos 1.000 trabajadores del sindicato de tripulantes de cabina de la misma compañía, que obligó a cancelar unos 2.000 vuelos al interior de Chile.
