"La movida acá en Uruguay es simplemente expresar nuestra solidaridad con la campaña por el aborto legal en Argentina, sumarnos a la campaña que es una expresión internacional, en muchas ciudades del mundo las feministas estamos expresando nuestra solidaridad", dijo Celiberti.
Para el 8 de agosto está prevista la sesión del Senado argentino que debe tratar el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo aprobado en junio por la Cámara de Diputados.
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La manifestación en Uruguay, convocada a través de las redes sociales, será llevará a cabo a las 18:00 hora local (21:00 GMT) frente a la embajada de Argentina, ubicada en el centro de Montevideo.
Uruguay, Cuba y Puerto Rico son los únicos países de América Latina donde el aborto voluntario es legal.
La ley de interrupción voluntaria del embarazo se aprobó en Uruguay en 2012 y permite abortar hasta la semana 12 de gestación y hasta la 14 en caso de violación.
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Además, se contempla la interrupción del embarazo sin plazo cuando hay riesgo grave para la salud de la mujer y ante malformaciones del feto incompatibles con la vida.
La coordinadora de Cotidiano Mujer indicó que "la ley en Uruguay tiene restricciones, abre muchos espacios para que actúen quienes se oponen a la ley, pero a pesar de ello la apoyamos".
Durante el debate en el Senado, algunos legisladores propusieron modificaciones para hacerlo menos estricto y conseguir los votos necesarios para su aprobación.
El 1 de agosto las tres comisiones del Senado concluyeron en desacuerdo sobre si se logró o no un dictamen a favor del texto con modificaciones.
A raíz de esa situación, la sesión del miércoles 8 de agosto arrancará con una discusión técnica sobre qué proyecto se tratará en primer lugar, el modificado que no obtuvo mayoría en las comisiones, o el votado por la cámara baja.
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Las modificaciones sugeridas son reducir de 14 a 12 semanas de gestación el plazo para un aborto voluntario, permitir la "objeción de ideario" para las instituciones médicas confesionales y eliminar las penas para el personal médico que se niegue u obstaculice las interrupciones de embarazos sin haberse inscripto previamente en el registro de objetores de conciencia.
La feminista uruguaya Celiberti cree que las modificaciones van "en perjuicio de los derechos de las mujeres", por ejemplo, la reducción del plazo a 12 semanas de gestación.
"Sabemos por la práctica en Uruguay que hay algunas situaciones en las que, sobre todo cuando se da en caso de adolescentes que llegan muy tarde a darse cuenta que están embarazadas porque son chicas que todavía no tienen del todo desarrollada su regularidad menstrual, las 14 semanas es más tranquilo como para poder decidir qué hacer", afirmó Celiberti.
El fin de semana, los sectores que se oponen al aborto legal movilizaron a unas 600.000 personas.
Además, la Conferencia Episcopal Argentina convocó para el miércoles a las 20:00 hora local (23:00 GMT) a la 'Misa por la Vida' en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires.
