"Presentamos el resultado fiscal del segundo trimestre del 2018, donde vamos a demostrar que por sexto trimestre consecutivo Argentina cumple las metas fiscales con las que viene trabajando y que nos van a conducir al equilibrio fiscal primario en 2020", afirmó Dujovne.
Para este año el Gobierno se propuso llegar a un déficit fiscal de 2,7% del Producto Interno Bruto (PIB), luego reducirlo a 1,3% el año próximo para llegar al equilibrio fiscal en 2020.
El jerarca reconoció que existe desempleo y una alta inflación y que esto se debe a un problema fiscal que se arrastra "desde hace décadas".
"Argentina arrastra un problema fiscal desde hace décadas lo que nos ha puesto en una situación de debilidad que se ha manifestado en una economía muy volátil, de bajo crecimiento, de alta inflación, baja productividad, donde nos ha costado muchísimo crecer sostenidamente, bajar el desempleo y reducir la pobreza", afirmó.
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En 2017 la inflación en Argentina fue de casi 25% y se estima que este año supere el 28%.
El año pasado Argentina adoptó una meta de déficit primario de 4,2% del PIB, la cual se ha "sobrecumplido" puesto que el indicador fue de 3,8%del PIB, según el ministro.
Para este año el Gobierno trabaja hacia una meta de 2,7%, más estricta que la planteada antes del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que fue de 3,2%.
"Gracias a esta modificación en las metas, el tamaño del programa financiero de Argentina es mucho más chico, necesitamos financiar 20.000 millones de dólares menos porque hemos acelerado el ritmo de convergencia del equilibrio y eso libera muchos recursos que van a poder ser captados para la inversión productiva por las empresas y las familias para tomar un crédito hipotecario", indicó.
El déficit primario se redujo un 0,7% en junio pasado frente al mismo mes del 2017, para situarse en 56.664 millones de pesos (algo más de 2.000 millones de dólares).
Esa reducción se debe, explicó Dujovne, a que "los ingresos crecieron a un ritmo más elevado que el gasto".
El Gobierno efectuó estos anuncios sobre la situación fiscal un día antes de que llegue al país la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, para participar de la reunión de ministros de finanzas y titulares de bancos centrales del Grupo de los 20 países industriales y emergentes (G20) y para supervisar la marcha del préstamo "stand-by" firmado el mes pasado con Argentina.
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El FMI aprobó el 20 de junio pasado el "stand-by" (acuerdo de derecho de giro) de 50.000 millones de dólares "para fortalecer" el programa económico gubernamental de Argentina, según indicó la entidad financiera multilateral.
Tras un desembolso inicial de 15.000 millones, las futuras entregas de recursos se realizarán contra el cumplimiento de metas fiscales que fueron establecidas en la carta intención firmada por Argentina el 12 del mes pasado.
