"Fue Chile quien convocó e invitó a los países miembros del Grupo de Lima, a los cancilleres o sus representantes, a la embajada chilena en Bruselas con el fin de abordar el tema de la tragedia y gran crisis que está viviendo ese país", dijo Ampuero en conferencia de prensa.
"El presidente (Sebastián Piñera) me entregó la instrucción de activar una declaración conjunta por la situación de Nicaragua, dramática por cierto, con más de 340 muertos y miles de heridos", indicó.
Ampuero se reunió en la embajada de Chile en Bélgica con un grupo de cancilleres y representantes diplomáticos de algunos países de la región, donde se acordó escribir la declaración.
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"En esta reunión sentamos las bases entre los cancilleres y sus representantes de los países del Grupo de Lima para esta declaración, que fue elaborada en detalle durante el 16 de julio por distintas delegaciones", dijo.
En ella, expresaron su preocupación por "la violación de los derechos humanos", y condenaron "los graves y reiterados hechos de violencia que se vienen produciendo en Nicaragua".
Nicaragua está inmersa en una grave crisis política desde el 18 de abril pasado, cuando comenzó una ola de protestas contra el Gobierno que derivó en duros enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad.
