"No descansaremos hasta que se haga justicia", fue el grito de las familias mientras veían descender los ataúdes de Katty Velasco y Óscar Villacís desde el avión de la Fuerza Aérea Ecuatoriana que los trajo de vuelta desde Pasto (sur colombiano).
A la salida, las familias pidieron respetar "este momento de dolor", lo mismo los representantes del Gobierno.
La ministra de Justicia, Rosana Alvarado, señaló que desde el Estado rechazan "este crimen cometido por criminales que no han tenido ningún reparo en la humanidad, en la juventud de estas dos personas" y aprovechó para advertir que no darán más información sobre el tema hasta que los hechos se esclarezcan un poco más.
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Por su parte, el abogado de Katty Velasco, Leonardo Tipán, manifestó el descontento de las familias por la falta de apoyo del Estado y anunció que de ser necesario llegarán a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) "para hacer prevalecer los Derechos de Óscar y Katty" y que "se pueda demostrar qué hizo el Estado ecuatoriano y cuáles son las acciones" que se tomaron.
"Que el presidente [Lenín Moreno] nos indique públicamente qué es lo que han hecho respecto a esta pareja que fue asesinada cruelmente", insistió Tipán.
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El pasado miércoles, las autoridades colombianas confirmaron que los cuerpos hallados en Tumaco (sur de Colombia) correspondían a los jóvenes y que la causa de su muerte fue anemia debido a la pérdida de sangre por las heridas que les realizaron con armas corto punzantes.
El secuestro de los ciudadanos se conoció el pasado 17 abril, luego de que el entonces ministro del Interior, César Navas, anunciara que recibieron un video como prueba de vida en el que se constataba que habían sido retenidos por el Frente Oliver Sinisterra.
Esta organización criminal fue además la responsable del secuestro y asesinato de los periodistas de diario El Comercio, cuyos cuerpos también fueron localizados en Tumaco el 21 de junio y sepultados en Quito la semana pasada.
