"El expresidente Funes tiene calidad de imputado, acusado de delitos de corrupción, prófugo de la justicia; todo probado con prueba técnica, pericias, testimonios y otras", dijo el fiscal en una rueda de prensa transmitida por redes sociales.
El fiscal general aseveró que el expresidente "creo una nueva forma de desviar fondos públicos al crear partidas de gastos imprevistos; lo anterior fue admitido por el exministro de Hacienda, Carlos Cáceres".
"Se incrementaron ilegalmente los Gastos Reservados en más de 351 millones de dólares, representando el 50,92% del presupuesto total ejecutado por Casa Presidencial, sin justificación alguna", dijo Meléndez.
El fiscal aseveró que "se han girado decenas de órdenes de captura en contra de exfuncionarios, familiares y militares que han servido de testaferros al exmandatario".
"En la investigación hemos demostrado que el spa de Ada Michelle Guzmán fue constituido con fondos públicos, y el sueldo de 10.000 dólares que tenía por ser gerente de ese spa privado, también salía de la partida de Gastos Reservados del Estado", dijo el fiscal.
También fue imputado el hijo del expresidente, Diego Funes Cañas.
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El fiscal aseveró que los investigadores de este caso están bajo amenaza.
"Solicito a la comunidad internacional que esté atenta a cualquier atentado en contra del fiscal general, en contra de algún fiscal que ha investigado este caso o algún funcionario de la fiscalía porque ya tenemos registros de seguimiento a fiscales y empleados de la institución", dijo Meléndez.
En 2016, cuando Funes era investigado por delitos como enriquecimiento ilícito, solicitó y obtuvo asilo político en Nicaragua, donde reside actualmente.