"Siete personas, entre ellas dos adolescentes, han sido sancionadas tras ser identificadas como responsables de las llamadas de amenazas de bombas", declaró el 3 de mayo a los medios el delegado del Consejo de la Judicatura, Lenin Zeballos.
El funcionario explicó que los adolescentes implicados fueron sancionados con 100 horas de trabajo comunitario, además deberán redactar un ensayo y emitir las respectivas disculpas públicas por su delito.
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En total, la policía registró 16 llamadas con falsas alertas de bombas y las labores para dar con los responsables de cada una de ellas continúan.
Tras los atentados ocurridos en la frontera con Colombia, que hasta el momento han cobrado la vida de siete ecuatorianos, se han reportado también alarmas de bomba en sitios como el legislativo ecuatoriano, unidades educativas y hospitales, alertas que después fueron desestimadas por las autoridades pero que en su momento angustiaron a la población.
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Estas amenazas han tenido lugar en Quito y en otras ciudades como Santo Domingo (centro) e Ibarra (norte).
