"En esencia, el avión tenía un déficit de 2.303 kilogramos de combustible (…), ya que para recorrer la ruta" entre Santa Cruz (Bolivia) y Ríonegro (Colombia) se exigía "una cantidad mínima de combustible de 11.603 kilogramos y esta aeronave solo contaba con 9.300 kilogramos", indicó el coronel retirado Miguel Camacho Martínez, jefe del Grupo de Investigación de Accidentes de la Aerocivil.
Más: Fiscalía brasileña vincula avión siniestrado del Chapecoense con exsenador venezolano
Para los investigadores de la Aerocivil, ni la compañía LaMia ni la tripulación del vuelo tuvieron en cuenta "el combustible requerido para volar a un aeropuerto alterno, el de contingencia, el de reserva ni el combustible mínimo de aterrizaje".
Por último, la Aerocivil entregó una serie de recomendaciones de obligatorio cumplimiento para la Autoridad Aeronáutica de Bolivia, la Administración de Aeropuertos y Servicios a la Navegación Aérea de Bolivia y a la Organización de Aviación Civil Internacional.
Tema relacionado: Vuelo fatal del Chapecoense no tenía seguro ni permiso para ingresar a Colombia
El accidente se cobró la vida de cinco bolivianos, un paraguayo y un venezolano que integraban la tripulación, así como de 21 periodistas brasileños y 52 miembros del equipo de fútbol Chapecoense.
Solo seis personas lograron sobrevivir al accidente, ocurrido en la noche del 28 de noviembre de 2016 cerca del aeropuerto de Rionegro, vecino a la ciudad colombiana de Medellín (noroeste).