Conmoción en Brasil por el asesinato de una concejal que denunció abusos policiales

RÍO DE JANEIRO (Sputnik) — El Gobierno de Brasil anunció que investigará el asesinato de la concejal del estado de Río de Janeiro, Marielle Franco, una de las voces más críticas con los abusos policiales y la intervención militar en esa jurisdicción, quien fuera muerta a balazos el 14 de marzo en plena calle.

"El Gobierno seguirá toda la investigación del asesinato de la concejal Marielle Franco y del conductor que la acompañaba la noche de este miércoles [14 de marzo]; el ministro de Seguridad Pública, Raul Jungmann, habló con el interventor general en el estado, el general Walter Braga Netto, y puso a la Policía Federal a disposición para ayudar en toda la investigación", informó el Gobierno en un comunicado.

Franco, del Partido Socialismo y Libertad, fue asesinada de cinco tiros en la cabeza después de participar en una charla feminista en el centro de la ciudad de Río de Janeiro; un vehículo con los cristales polarizados cerró el paso al coche en el que viajaba y los asaltantes dispararon contra ella y contra el conductor, que fue herido en la espalda y también murió en el acto.

La hipótesis de un atraco se descartó rápidamente, pues las primeras informaciones de la Policía Civil apuntaron que los asaltantes no robaron sus pertenencias, por lo que todo apunta a que se trató de una ejecución planeada.

Nacida en la favela (barrio carenciado) de la Maré hace 38 años, Franco era socióloga y desarrollaba un trabajo muy centrado en la defensa de los derechos de las mujeres, la población negra y los jóvenes que sufren con la violencia en los suburbios.

La concejala formaba parte de una comisión creada en febrero para seguir de cerca la intervención militar decretada por el Gobierno brasileño en el estado de Río, operación con la que se mostró muy crítica por las posibles violaciones de derechos humanos que podía conllevar su actuación.

Pocos días antes de ser asesinada, el pasado sábado 10 de marzo, Franco escribió en la red social Twitter uno de sus muchas denuncias contra la violencia policial.

"Otro homicidio de un joven que puede estar entrando en la cuenta de la Policía Militar; Matheus Melo estaba saliendo de la iglesia, ¿cuántos tienen que morir para esta guerra acabe?", expresó.

Poco después de ser asesinada su partido emitió un comunicado en el que no desechaba la hipótesis "de un delito político, es decir de una ejecución", por lo que pidió una investigación inmediata y rigurosa sobre este crimen "gravísimo".

"Marielle había acabado de denunciar la acción brutal y truculenta de la Policía Militar en la región de Irajá, en la comunidad de Acari (norte de Río de Janeiro); además de eso, las circunstancias del crimen [un coche se acerca al vehículo donde estaba la concejala, lo acorrala, se efectúan muchos disparos y huye enseguida] refuerzan esa posibilidad", subrayaron.

El alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, lamentó el "brutal asesinato de una concejal cuya honradez, valentía y espíritu público representaban virtudes inigualables de la mujer carioca", y dijo que la ciudad quedaba "desolada y llena de amargura" por la pérdida de una hija inolvidable, por lo que decretó tres días de luto oficial.

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Amnistía Internacional pidió a través de un comunicado que el Estado brasileño, a través de los órganos competentes, garantice una investigación inmediata y rigurosa.

"No pueden quedar dudas sobre el contexto, la motivación y la autoría del asesinato de Marielle Franco", advirtió la organización.

El velatorio de Franco se celebrará la mañana del 15 de marzo en la Cámara Municipal de Río de Janeiro y por la tarde tendrá lugar una manifestación de repulsa a su asesinato que partirá de la Asamblea Legislativa del Estado de Río de Janeiro y recorrerá el centro de la ciudad.

Otras marchas fueron convocadas de forma espontánea en las principales ciudades de Brasil de forma espontánea.