"Ha sido más feliz, más intensa y mucho más gratificante de lo que yo esperaba", declaró a la prensa el expreso político, quien cumplió más de 35 años en cárceles estadounidenses, cuatro de ellos junto al Héroe de la República de Cuba y actual titular del ICAP, quien al igual que otros cuatro compatriotas cumplió sanción de más de tres lustros en la nación del norte por tratar de evitar acciones violentas contra la isla, orquestadas en ese país.
Durante su estancia en Cuba, el patriota boricua fue condecorado con la Orden de la Solidaridad y recibió personalmente la Orden El Mehdi Ben Barka, de la Organización de Solidaridad de los Pueblos de Asia, África y América Latina, distinción que le había sido otorgada en 2013.
Igualmente, participó en un homenaje a Fidel Castro en la Casa del ALBA Cultural y en un encuentro con estudiantes en la Universidad de La Habana.
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Durante su recorrido por las provincias de La Habana, Villa Clara, Santiago de Cuba, Granma, Holguín y Guantánamo, el independentista dialogó con autoridades locales, recibió reconocimientos, intercambió con la población y visitó sitios de interés histórico como el ingenio Demajagua, el antiguo cuartel Moncada, la casa natal de Fidel Castro y Raúl Castro, en Birán, Holguín, el museo Ñico López y el territorio de Caimanera, donde Estados Unidos mantiene la base naval de Guantánamo en contra de la voluntad de los cubanos.