"La República Argentina expresa su profundo reconocimiento a la colaboración internacional que nuestro país está recibiendo en las operaciones de intensa búsqueda del Submarino ARA (Armada de la República Argentina) San Juan", informó el ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Todos estos países intervienen con embarcaciones, aviones, recursos humanos y tecnológicos "que de forma tan dispuesta han colocado al servicio de esta búsqueda humanitaria que moviliza a todo el pueblo argentino", según la Cancillería.
Unas 4.000 personas participan en las tareas de búsqueda para encontrar al submarino y a sus 44 tripulantes, que dieron a conocer su última posición desde hace seis días.
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La embarcación comunicó en ese momento que se encontraba a 430 kilómetros mar adentro, a la altura de la Península Valdés (sureste), cuando transitaba las aguas del Atlántico en su desplazamiento desde la ciudad austral de Ushuaia (Patagonia) a la balnearia de Mar del Plata, en la provincia de Buenos Aires.
La nave tiene una autonomía máxima de siete días de oxígeno en el caso de que permanezca todo el tiempo en inmersión y no pueda salir a superficie, plazo que se cumpliría el 22 de noviembre.
El buque perdido, fabricado en 1983 en Alemania y adquirido por la Armada argentina en 1985, es uno de los tres submarinos con los que cuenta la fuerza naval.
De 65 metros de eslora y un diámetro de casco resistente de siete metros, el navío fue sometido a una minuciosa reparación entre 2008 y 2015 que incluyó el corte del casco.