"La cifra que nos ha presentado el ministro de Economía confirma nuestras previsiones, pero sobre todo es una alerta que nos convoca a todos los sectores y actores a aunar los esfuerzos y tomar decisiones urgentes para revertir esta tendencia y recuperar los niveles de crecimiento que se alcanzaron en los últimos años", declaró el jerarca del empresariado boliviano a través de un boletín de prensa de esa entidad.
Más temprano el 30 de octubre, el ministro de Economía, Mario Guillén, informó que el crecimiento económico de Bolivia de julio de 2016 a junio de 2017 fue del 3,98%, mientras que el crecimiento del primer semestre de este año fue del 3,58%.
Según datos del Ministerio de Economía, el mayor crecimiento del Producto Interno Bruto se registró en 2013 con el 6,24%; en 2014 fue del 5,8%; en 2015 fue del 5,32% y en 2016 del 4,46%.
"Estamos a tiempo, porque todavía tenemos reservas y el impulso suficiente, pero debemos tomar medidas que desaten procesos de inversión y crecimiento con equilibrio macroeconómico fiscal y externo", dijo.
En esa dirección advirtió la necesidad de que las exportaciones bolivianas "ganen espacios" para generar "empleos protegidos y durables en el largo plazo".
La empresa privada busca mayores incentivos del Gobierno para impulsar la inversión y el desempleo en sectores "no tradicionales" de la economía y así lograr "un crecimiento sostenible".
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En los próximos días, la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia hará conocer una propuesta integral para hacer frente la actual coyuntura económica del país, concluyó Nostas.