"En este contexto, si por un lado el trágico acontecimiento repercutió en esta capital y en el mundo, es un hecho que el custodiado estaba trabajando y que posee una inmaculada ficha policial, sin que haya indicios de que suelto pueda reiterar el comportamiento criminal ocurrido a la luz del día", afirmó el juez Juarez Costa de Andrade en su decisión, según comunicado oficial del tribunal.
El magistrado también destacó que el policía militar no está en condiciones psicológicas de volver a las operaciones en las calles y que debe dejar de patrullar, ejerciendo únicamente actividades administrativas.
El agente fue detenido el lunes acusado de disparar a un vehículo que llevaba turistas de excursión por Rocinha.
Los policías alegaron que el coche traspasó un control policial y no frenó ante la señal de los agentes, pero los ocupantes del vehículo afirman que no percibieron ningún control.
El reglamento interno de la Policía Militar no permite disparar en estos casos, sino que recomienda una persecución del vehículo sospechoso.
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Aunque de momento permanezca en libertad el teniente se enfrentará a un proceso judicial por presunto delito de homicidio doloso, cuando se asume el riesgo de matar.
La favela Rocinha es la mayor de Río de Janeiro y en las últimas semanas vivió un aumento de la tensión debido a enfrentamientos entre bandas rivales del narcotráfico que forzaron incluso la intervención de las Fuerzas Armadas.
No es la primera vez que un turista muere baleado en Río de Janeiro, pero sí la primera vez que lo hace en el marco de una excursión en una favela y a manos de un policía.
