"Se ha desplegado a un grupo de funcionarios del Grupo de Operaciones Especiales para que, en coordinación con las autoridades norteamericanas, se establezcan los protocolos para el traslado seguro y humano de los compatriotas", dijo este lunes en conferencia de prensa el ministro de Interior, César Navas.
En esta labor intervienen también la cancillería, el ministerio de Defensa y el ministerio de Justicia, con funciones específicas para lo que suscribieron un convenio interinstitucional con el fin de llevar adelante estas acciones.
La ministra de Justicia, Rosana Alvarado, explicó que esta es una repatriación masiva de "pescadores detenidos en alta mar y se está dando gracias al ministerio de Defensa", pues "no es muy sencillo hablar de una repatriación desde EEUU; sin embargo, el trámite ha dado sus frutos y no estamos dejando de atender a aquellos ciudadanos en condiciones de vulnerabilidad".
"Hoy damos un paso importante para tener de vuelta a nuestros pescadores y también para aliviar el dolor y el sufrimiento que han tenido que enfrentar sus familias", agregó la ministra.
Por su parte, el titular de la cartera de Defensa, Patricio Zambrano, aclaró que este primer acuerdo es "un plan piloto que constituye un hito histórico para el país", pues "es la primera vez que se realiza un traslado de tal magnitud".
En esa misma línea, la canciller María Fernanda Espinosa pidió a los connacionales "que tengan la certeza de que su Gobierno va a estar protegiendo, garantizando sus derechos y garantizando que el retorno a su país se dé en las condiciones más adecuadas".
La cancillería conoce 661 casos de ecuatorianos privados de libertad en Estados Unidos, de los cuales 76% enfrenta penas por narcotráfico.
La mayoría de ellos son ciudadanos originarios de Manabí y Esmeraldas, provincias costeras ubicadas al oeste del país donde se ha registrado un número creciente de pescadores detenidos en aguas internacionales por asuntos de drogas.