"El Parlasur declara y manifiesta repudio a cualquier opción que infrinja la autodeterminación del pueblo de Venezuela", dice el comienzo del texto aprobado por apenas 37 votos de 51 parlamentarios presentes.
"Exigimos respeto para Venezuela y para nuestro Gobierno y exigimos la no injerencia; rechazamos la declaración de intervención militar de EEUU", afirmó el diputado del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela, William Pérez.
Sin embargo, la propuesta de que la sesión debatiera la crisis de Venezuela no logró las voluntades necesarias, a pesar de que se intentó en dos votaciones, pues se requería la mayoría absoluta de los presentes para introducir el tema en el orden del día.
En la primera ronda, la iniciativa logró 30 votos en 62 presentes y en la segunda consiguió 32 votos en 65 presentes.
La nota la dieron los representantes del opositor Partido Nacional (PN) de Uruguay, que votaron ambas propuestas.
El diputado uruguayo Gustavo Penadés argumentó en sala que "los legisladores del PN votaron favorablemente las dos mociones, porque es ridículamente contradictorio que para la propuesta de discutir la situación de Venezuela que minutos antes se pretendió llevar adelante no hubo votos, pero en este caso, para condenar las desafortunadas declaraciones del presidente de EEUU sí hay votos".
Con todo, Penadés deploró que "nos neguemos a llevar adelante un debate democrático sobre la situación de Venezuela".
El representante de la MUD, Williams Dávila, denunció presiones del oficialismo venezolano para que la delegación de esa coalición fuera excluida del Parlasur, bajo el argumento de que la recién instalada Asamblea Nacional Constituyente (ANC), integrada solo por oficialistas, despojó la semana pasada de facultades legislativas a la Asamblea Nacional (parlamento unicameral, de mayoría opositora).
Sin embargo, Dávila dijo que "el Parlamento del Mercosur reconoce la continuidad de nuestra delegación pese a intentos de impedirlo, la Asamblea Nacional es la legítima representación popular".
El Mercosur suspendió este mes a Venezuela, en virtud de la aplicación de la cláusula democrática incluida en el Protocolo de Ushuaia, por entender que el Gobierno de ese país había quebrado el orden democrático al instalar la ANC.
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El presidente de EEUU sostuvo el 11 de este mes que su administración no descartaba la "opción militar" para resolver la crisis interna que vive ese país sudamericano.
