"Hemos hecho en dos años lo que estaba planeado para 10 o 20 años", indicó Santos en el municipio de Cocorná (Antioquia, suroeste), uno de los más afectados en la década de los 90 con este tipo de explosivos, señaló la Presidencia colombiana.
Colombia, después de Afganistán, es el segundo país con mayores minas antipersonales sembradas en sus suelos, por lo que el Gobierno ha propuesto limpiar su territorio de aquí al año 2021.
"Las guerras son acumulación de horrores, pero en medio de esos horrores uno de los peores es el de las minas antipersonal", expresó Santos.
En total la Brigada de Desminado Humanitario del Ejército de Colombia cumplió tareas de despeje de más de nueve millones de metros cuadrados a nivel nacional, y sólo en Cocorná destruyó 26 de esos artefactos.
"Colocar minas es muy fácil y barato, pero eliminar y desaparecer es costoso y peligroso", dijo el jefe de Estado colombiano.
Luego de que las poblaciones son declaradas libres de minas se espera que el Estado llegue con proyectos productivos y de reactivación social y agrícola.
En el acto participaron el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas; el alto comisionado para la paz, Rodrigo Rivera; el alto consejero para el posconflicto, Rafael Pardo, y el embajador de Estados Unidos, Kevin Whitaker, entre otros.