"Estamos profundamente preocupados por el hecho de que en Honduras, incluso hoy, defensores de derechos humanos y activistas que protegen y promueven los derechos humanos de las personas LGBTI son a menudo el blanco de actos violentos", afirmaron los expertos.
Asimismo, los expertos expresaron preocupación por la continua información relacionada con amenazas y ataques y por el nivel de violencia que ha llevado incluso a la pérdida de vidas.
"La violencia y la intimidación contra los defensores de los derechos humanos LGBTI deben recibir una respuesta firme de los gobiernos", concluye el comunicado.
Los relatores aseguraron que cualquier acto de violencia contra estos activistas exige una respuesta firme del Gobierno para garantizar que desempeñen su labor con libertad y seguridad.