El primado de la iglesia católica confesó que reza por "esa querida nación" e hizo llegar sus condolencias "a las familias que han perdido a sus hijos en las manifestaciones".
"El 5 de julio se celebrará la fiesta de la Independencia de Venezuela, (….) hago un llamamiento para que se ponga fin a la violencia y se encuentre una solución pacífica y democrática a la crisis", dijo el Pontífice, citado por Radiovaticano.
Posteriormente esa decisión se derogó, pero los partidarios de la oposición se lanzaron a las calles exigiendo la dimisión de los magistrados del Supremo y la celebración de las elecciones anticipadas.
Los manifestantes también protestan contra la convocatoria a la Asamblea Constituyente, considerando que es un intento de cambiar la constitución del país.
Según las últimas informaciones, un total de 83 personas ya han perdido la vida en las protestas en Venezuela.