El interrogatorio "se entiende como una providencia inadecuada y precipitada, ya que está pendiente la conclusión de la pericia en el audio grabado por uno de los delatores", argumentó la defensa en el escrito presentado ante el Tribunal, según informó la Agência Brasil.
Recientemente un representante de la policía se puso en contacto con los abogados del presidente para coordinar una fecha para su declaración.
La defensa, en cambio, considera que esto no debe hacerse hasta que no se aclare la naturaleza del audio en el que presuntamente se hace evidente que Temer da luz verde a sobornos para comprar el silencio del expresidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cunha, actualmente en prisión condenado por corrupción.
Los abogados de Temer también quieren que si finalmente el presidente es interrogado por la Policía esté presente durante la indagatoria el magistrado del TSF encargado de la Operación Lava Jato, Edson Fachin.
La crisis abierta en el Gobierno de Brasil tras la divulgación de esa grabación es la más grave en la historia reciente del país, pero el presidente remarcó en varias ocasiones que no piensa dimitir.