"Además del fin de las agencias propias de Correos, con el fortalecimiento de las franquicias (…) se implantó la entrega alternada, lo que profundiza en la mala calidad de la entrega de correspondencias", señaló la Federación Nacional de los Trabajadores en Empresas de Correos y Telégrafos y Similares (Fentect) en un comunicado para justificar la protesta.
La Empresa Brasileña de Correos y Telégrafos (o simplemente Correos) se encuentra en una situación deficitaria.
Su presidente, Guilherme Campos, reconoció que la compañía tuvo pérdidas por casi 2.000 millones de reales (630 millones de dólares) entre 2015 y 2016.
La empresa no contrata a nadie desde 2011, y el año pasado puso en marcha un programa de bajas voluntarias al que se sumaron 5.500 trabajadores.
Actualmente, Correos de Brasil posee casi 6.500 agencias propias, además de 1.000 que operan en régimen de franquicia.
El inicio del paro indefinido de los trabajadores de Correos se anticipa a la huelga general que está convocada para este viernes en todo Brasil.
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Sindicatos y movimientos sociales protestarán contra las reformas económicas del Gobierno de Michel Temer (Partido del Movimiento Democrático de Brasil).
