Las principales incidencias se produjeron a primera hora de la mañana en São Paulo, donde los sindicatos del metro y las empresas de autobuses habían decretado una huelga total.
A pesar de ello la Compañía Ingeniería de Transporte de São Paulo (CET) informó de que a primera hora de la mañana la ciudad registraba 201 kilómetros de colas en las retenciones del tráfico, cuando normalmente hay entre 53 y 89 kilómetros, debido a los usuarios que temían un colapso del transporte público.
En la capital, Brasilia, lo más destacado por el momento fue la ocupación del Ministerio de Hacienda por parte de un grupo de 2.000 manifestantes, según la Policía Militar.
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La protesta fue liderada por integrantes del Movimiento de los Sin Tierra (MST), que desplegaron una gran pancarta contra la reforma de las pensiones desde lo alto del edificio del ministerio.
En Río de Janeiro los trabajadores de las empresas de autobuses también acordaron en asamblea sumarse a la paralización, pero el seguimiento está siendo mínimo y la situación es de normalidad.
Sí amanecieron cerradas en cambio decenas de escuelas públicas y privadas, que a lo largo de los últimos días fueron anunciando su apoyo a la jornada de protesta.
En Belo Horizonte (capital de Minas Gerais) el metro no funcionaba a primera hora de la mañana; con una flota de 35 trenes transporta cada día a casi 210.000 usuarios, según la Compañía Brasileña de Trenes Urbanos.
A pesar de estas y otras acciones puntuales la mayoría de actos reivindicativos de la jornada está prevista para la tarde, con marchas que se esperan multitudinarias en diversas ciudades.
Los convocantes critican que con la reforma del sistema de pensiones que plantea Temer la edad de jubilación subirá hasta los 65 años y será igual para hombres y mujeres, lo que consideran discriminatorio.
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También rechazan que la reforma afecte tanto a trabajadores del sector privado como del público —de momento sólo estarán exentos los militares— y que con las nuevas reglas el trabajador que desee jubilarse recibiendo la pensión integral tenga que contribuir al sistema durante 49 años.
