La agencia Reuters, que cita a funcionarios locales, menciona la cifra de al menos 478 fallecidos y miles de desplazados por la tormenta que destruyó viviendas, arrancó árboles y anegó barrios enteros.
Anteriormente se informó de 339 muertos y más de 34.000 personas sin hogar.
Solo en el Departamento del Sur, una provincia poblada por casi 700 000 personas, el 80 por ciento de las viviendas sufrieron daños.
Más de 61.500 personas permanecen en refugios en la pequeña nación caribeña que no acaba de recuperarse aún del devastador terremoto de 2010.
El huracán Matthew, el más fuerte de los últimos 10 años, se acercó entretanto a la costa sur de EEUU aunque su intensidad bajó del grado 4 a 3 en la escala de cinco.