Así como los encuestadores se equivocaron en prever el resultado del referéndum sobre el Brexit de junio en el Reino Unido, donde ganó el Si a favor del retiro de la Unión Europea, esta vez, los encuestadores colombianos se equivocaron de punta a punta.
Desde que se alcanzó el acuerdo entre las FARC y el gobierno colombiano el 24 de agosto, las mediciones indicaban que la mayor parte de la población apoyaría al acuerdo. Hasta último momento las encuestadoras aseguraban que el 'Si' se impondría con cifras mayores al 60% de los votos.
"Hay desafíos concretos para medir los resultados cuando se trata de una situación donde lo que se vota es blanco o negro. Hay ciertos factores que hacen que la encuesta por muestreo pueda cometer errores. Cuando tiramos una moneda al aire las probabilidades de que salga una u otra cara son 50-50. Esa es la peor de las probabilidades para la estadística", dijo en diálogo con Sputnik Roberto Bacman, titular del Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP).
El 'No' se impuso con el 50,22% de los votos, apenas 60.000 sobre casi 13 millones. "Muchas veces por vergüenza la gente no dice lo que va a votar hasta el último momento y detrás del indeciso o del que no contesta se puede esconder algo muy difícil de medir. Hay sectores de Colombia que quieren que haya castigo para los responsables de todo lo que ocurrió. Allí aparecen los componentes vergonzantes, la gente que no quiere decir a los encuestadores lo que realmente iba a votar. Vimos un caso así durante el Brexit. Cuando encontramos a sociedades muy divididas o marcadas ideológicamente, existen mayores riesgos de cometer errores en los pronósticos", dijo Bacman.
Para mejorar las mediciones existen "instrumentos de orden cualitativo como los grupos focales, entrevistas en profundidad, estudios culturales y antropológicos que pueden servir para tratar de detectar estas situaciones. Pero a veces no hay tiempo ni dinero para eso", explicó Bacman.
"La sorpresa en Colombia es porque la gente se dejó llevar por los resultados de las encuestas. Pero nadie se dio cuenta que por abajo del agua venía navegando un cocodrilo feroz que no pudimos ver. Quizás nadie quiso mirar muy al fondo. También es una pregunta para hacerse", concluyó el especialista.
