En una localidad del Caribe colombiano, entre Barranquilla y Santa Marta, se encuentra Nueva Venecia, una aldea de unas 3.000 personas que navega sobre la Ciénaga Grande de Santa Marta. A pesar de las inundaciones y el recuerdo de dos masacres, este pueblo construyó una cancha de fútbol. La pasión por este deporte, que rige la vida de la colectividad, es tan grande que inspiró una película. La dirige el uruguayo Emiliano Mazza de Luca con la asistencia de Martha Orozco. Para realizar el documental, que lleva el nombre de la comunidad, los realizadores se sumergieron en este territorio.
El fútbol es la pasión que mueve a Nueva Venecia. "Es el deporte que los une. La cancha es el único lugar de esparcimiento que tienen. Hay como diez cuadros. Todos tienen parientes futbolistas. También es la oportunidad para que las mujeres salgan a distraerse un poco. Es la excusa que tienen para descansar luego de una ardua semana de trabajo", dijo Orozco en el programa radial GPS Internacional, al tiempo que agregó que en el pueblo la mayor parte de las personas son pescadores.
La cancha se construyó en 1985. Su fundador, Rafael Moreno Retamoso, murió pero dejó un legado para su gente. "El amor por este deporte los empujó a construir una cancha arriba del agua y a vestir camisetas de fútbol todos los días. Es parte de su vestuario. Para los jóvenes de allí el deporte rey es una oportunidad. Ven que hay chicos de orígenes humildes que juegan en la selección. Todos sueñan con que ahí hay una posibilidad de trascendencia concreta para, como dicen ellos, ser alguien en la vida", agregó el director.
Debido a la violencia política, Colombia es un país con más de 7,5 millones de desplazados. La mayor parte de esas personas jamás regresó a sus tierras. El 22 de noviembre de 2000 la aldea sufrió de un ataque por parte de los paramilitares. Murieron 40 personas. Se lo recuerda como el miércoles negro. "El caso de esta aldea es interesante porque ellos, que también tuvieron un desplazamiento forzado por la guerra, volvieron. Un caso así es muy importante para este país porque es un pueblo que logró sanarse y que está empezando de nuevo en su lugar de origen", dijo Mazza de Luca, para quien el rodaje de la película tuvo un valor muy importante.
"Tenemos un aprendizaje para toda la vida. Fueron varias etapas desde 2014 en adelante. Al principio, por nuestra condición de foráneos, costó. Y para ellos también, porque tuvieron que acostumbrarse a nuestra presencia. Fue un acercamiento lento y en etapas", explicó.
Entre el 5 y 6 de diciembre de 1928 en este mismo municipio ocurrió la "Masacre de las Bananeras". El gobierno de Miguel Abadía Méndez, por presión de Estados Unidos que buscaba proteger los intereses de la United Fruit Company, ordenó reprimir una huelga donde se pedía mejores condiciones de trabajo. La cifra exacta de muertos es incierta, pero se estima que murieron cientos de trabajadores. El episodio fue inmortalizado por el escritor colombiano Gabriel García Márquez en su obra Cien años de soledad.
