"Tras seis meses de trabajo, la hoja de ruta para avanzar hacia una frontera moderna y segura (…) se encuentra en la etapa final: solo falta definir algunos puntos en la mesa de control migratorio y servicios fronterizos", informó el organismo.
El Gobierno de Colombia, bajo la orientación de la cancillera María Ángela Holguín, elabora dicha hoja de ruta a través de mesas de trabajo que se constituyeron en los departamentos de Norte de Santander, Arauca (nordeste) y La Guajira (norte) con el objetivo de brindarles a los habitantes de estas zonas una frontera altamente segura.
"Esto nos conducirá a seguir avanzando, con determinación, en la lucha contra el contrabando y contra la ilegalidad", agregó el comunicado de la Cancillería.
La frontera entre Colombia y Venezuela permanece cerrada desde el 19 de agosto de 2015 por orden del presidente Nicolás Maduro, quien señaló que tomó la medida a raíz del aumento del contrabando y por la infiltración de paramilitares colombianos que chocaban con uniformados venezolanos.
Desde entonces, algunos pasos fronterizos han sido habilitados con el fin de permitir la movilización de estudiantes de un país a otro y el tránsito de camiones con carga represada.
La medida fue nuevamente adoptada el pasado fin de semana, cuando 120.000 venezolanos ingresaron tanto a Cúcuta como al departamento de Arauca para abastecerse.
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Sin embargo, el lunes Holguín anunció que las autoridades colombianas y venezolanas acordaron no habilitar más de manera temporal el paso fronterizo entre las dos naciones, y precisó que trabajan para que la próxima vez que se habilite el paso sea de manera definitiva.
