Además de Sarney, el fiscal pidió el arresto del presidente del Senado, Renan Calheiros, del senador Romero Jucá, exministro de Planificación de Temer, y del suspendido presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha.
Es la primera vez que la Fiscalía General pide la detención de un ex jefe de Estado.
La orden de detención contra Calheiros y Jucá, y de arresto domiciliario con tobillera electrónica para Sarney a causa de su avanzada edad, se basa en una a serie de grabaciones hechas por Sergio Machado, expresidente de Transpetro (subsidiaria de Petrobras), que supuestamente revelarían la intención de estos de detener las investigaciones sobre la corrupción en Petrobras.
La primera grabación en ser divulgada fue entre Machado y Jucá, y en ella el exministro hablaría de un pacto entre los poderes del Estado para sacar a Dilma Rousseff de la Presidencia y detener la llamada Operación Lava Jato, que investiga la corrupción en la petrolera, informó O Globo.
A los días de que la grabación saliera en los medios de comunicación, Jucá fue retirado de su cargo en el Ministerio de Planificación.
Sobornos
Machado también confesó a la Justicia que pagó sobornos a Calheiros, Sarney y a Jucá para la adjudicación de contratos de Transpetro, según informa Jornal do Brasil.
Las grabaciones divulgadas por Machado han complicado las cosas para el partido de Temer, a menos de un mes de que él mismo iniciara el proceso de destitución contra Rousseff.
Los escándalos de corrupción en torno al PMDB han provocado que el apoyo popular a la presidenta suspendida creciera exponencialmente con grandes manifestaciones de apoyo en todo Brasil.
