BUENOS AIRES (Sputnik) — "El ejercicio razonable de la contratación de personal no puede implicar un crecimiento desmedido e injustificado de empleados públicos que no obedezca a una estricta necesidad de funcionarios", señala el decreto de la vicepresidenta, quien también ejerce la presidencia de la cámara alta.
El documento se firmó el lunes un día antes del discurso del presidente Mauricio Macri ante las dos Cámaras del Congreso en la apertura de las sesiones legislativas, pero se dio a conocer recién este miércoles.
Los empleados despedidos eran contratados bajo la modalidad de "planta temporal" aunque muchos de ellos trabajaban en el Senado desde hace años.
"Durante el transcurso de los últimos años se han dictado diversos actos administrativos nombrando agentes en la planta temporal sin respetar los principios antes enunciados", indica la resolución.
A estos 370 despidos se suman 2.035 cesantías que la vicepresidente firmó al poco tiempo de asumir su cargo, aunque los sindicatos consiguieron que la mitad de estos trabajadores fueran recontratados.
El actual Ejecutivo de Macri ha manifestado su propósito de reducir el personal de la administración pública a través de la baja de contratos temporales y aduciendo que muchos de los empleados eran militantes políticos o personas vinculadas al Gobierno anterior que no acudían a su puesto de trabajo.
Los sindicatos se han constituido como el principal motor de denuncias de despidos injustificados y del "vaciamiento del Estado" que a su juicio emprende el Gobierno.
Según la Central de Trabajadores de Argentina (CTA), los despidos en la administración pública entre diciembre de 2015 y enero de 2016 alcanzaron a 27.199 personas, mientras que se contabilizaron 22.829 despidos en el sector privado.
