Venezuela tiene varios pases carreteros con Colombia en su frontera suroeste y noroeste, pero los cerró al tránsito de automotores hace seis meses, precisamente para evitar, entre otros problemas, la extracción de gasolina de contrabando hacia el vecino país.
También hay un punto de contacto carretero en el extremo sudeste con el norteño estado brasileño de Roraima.
La gasolina subió de precio en Venezuela la semana pasada, pero sigue siendo la más barata del mundo, según fuentes de la industria, pues un litro del tipo regular cuesta medio centavo de dólar al cambio oficial, y de la premium vale algo más de tres centavos.
El gobernador del estado de Táchira, frontera suroeste, José Vielma, dijo que “cuando abramos la frontera, yo soy partidario de vender gasolina en las estaciones de servicio de frontera a 150 o 200 bolívares el litro (entre 75 centavos y un dólar) en vez de los actuales precios”, equivalente a entre 25 y 40 centavos de dólar.
Venezuela tiene un consumo interno diario de 510.000 barriles (de 159 litros), de hidrocarburos, de los cuales cerca de 300.000 barriles son gasolinas, según cifras de su Ministerio de Petróleo.