Varios minutos antes de la fuga del jefe supremo del Cártel de Sinaloa –también llamado del Pacífico–, se escucha el ruido de taladros mecánicos perforando el piso de la ducha de la celda del reo más peligroso del país latinoamericano, según la grabación con imagen y audio obtenida por la cadena Televisa.
Entre el momento del sonoro derrumbe de la plataforma de la ducha –registrado en el audio–, y la desaparición de los monitores del reo más vigilado, transcurren casi 40 minutos, hasta que un par de custodios hacen el primer reporte por radio desde la celda: "Comandante (…), hay un hoyo en la regadera".
Con la revelación del audio, cobran sentido las imágenes de los movimientos del reo desde que se levanta de su cama algunas veces, mientras aparenta ver televisión, hasta que se esfuma por el piso de la regadera.
Pero el video ha sido presentado a pantalla dividida en dos partes, con otra filmación simultánea del centro de control de las cámaras, donde un grupo de custodios observa los monitores sin reaccionar, despreocupados, hasta más de una media hora después.
La llegada de los primeros guardias de la prisión a la celda es aún más rocambolesca, con gritos, insultos y golpes de rejas de vecinos de las celdas, y desconcertados vigilantes que buscan hasta debajo de la cama del reo, sin decretar la alerta roja.
El Comisionado Nacional de Seguridad de México, Monte Alejandro Rubido, dijo al presentar las imágenes del video sin audio, el 15 de julio, tres días después de revelado el escape, que "el comportamiento del interno el día de los hechos era hasta ese momento cotidiano, natural, de un interno que pasa largas horas dentro de su celda".
"Se puede corroborar que la cámara cuenta con dos puntos ciegos al interior de la celda, la razón de estos puntos ciegos es permitir la privacidad del recluso en las áreas sanitarias y de regaderas", indicó la versión oficial del máximo jefe de la seguridad nacional de México, quien fue reemplazado el 27 de agosto pasado.
Desde los primeros ruidos del taladro hasta que los responsables del monitoreo se reúnen frente a una de las pantallas, pasan al menos 25 minutos, desde las 20.52 hasta las 21.17 de la noche del 11 de julio pasado.
Sin embargo, la reacción y entrada de los primeros guardias a la celda tarda más de 10 minutos más, y decretar la alerta roja habría tomado incluso horas.
"¿De qué tamaño es el hoyo?", pregunta el comandante por radio al vigilante en la celda. "Grande comandante, grande…".
Entonces, comienza una movilización que muestra un desconcierto y falta de control de los custodios, mientras un guardia se decide a entrar a la boca del túnel, sólo para descubrir que había sido bloqueada desde el otro lado.
El secretario de la Comisión de Seguridad Nacional del Congreso, el izquierdista Alejandro Encinas, demandó la noche del miércoles la "inmediata comparecencia" de todo el alto mando federal de seguridad nacional del gobierno del presidente Enrique Peña.
La revelación del audio de las imágenes que fueron presentadas a la prensa pocos días después de la fuga, "hace evidente la alta complicidad que tuvo toda la cadena, desde los custodios hasta los más altos funcionarios", dijo Encinas.
"Se activó la alerta roja tres horas y 24 minutos después de la fuga, cuando se había dicho originalmente que no habían pasado 40 minutos", sostuvo el congresista. El legislador comentó que la revelación del audio "pudo haber sido fuego amigo, dentro del mismo Gobierno".
Tras nueve años prófugo, el Chapo fue arrestado en febrero de 2014, y se fugó por segunda vez apenas 17 días después de que una solicitud formal de extradición fue presentada –en privado– por el gobierno de Barack Obama, contra el acusado de haber sido el mayor traficante de cocaína desde Sudamérica hasta EEUU.
