Los líderes del subcontinente aprobaron 27 declaraciones especiales sobre los principales puntos de conflicto regional, que incluye el respaldo a Argentina en la reestructuración de la deuda soberana y la recuperación de las Islas Malvinas bajo control de Gran Bretaña.
El principal espacio de negociación exigió, además, el fin de las acciones unilaterales de EEUU contra Venezuela.
La CELAC también apoya los diálogos de paz entre el gobierno de Colombia y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionaria de Colombia, de acuerdo con la lista de las declaraciones especiales aprobadas por aclamación en la III Cumbre de Belén Costa Rica, a la cual asistieron presidentes, Jefes de Estado, y delgados de 33 naciones.
Otras declaraciones especiales se refieren a la condena al terrorismo, la lucha por el evitar el cambio climático, el fortalecimiento del sistema interamericano de DDHH.
La CELAC emitió pronunciamientos especiales sobre el control de armas convencionales, por lograr un mundo libre de armas nucleares, la transparencia y lucha contra la corrupción, y el financiamiento para el desarrollo.
Los dignatarios abordaron el tema de la gobernanza de internet, la solidaridad con los estados afectados por transnacionales y el combate al narcotráfico.
La educación para desarrollo sostenible, la arquitectura financiera internacional, la situación política en Haití, las víctimas de la esclavitud y la protección de los niños, también merecieron atención especial de la cumbre.