Desde el domingo pasado se desconoce el paradero del Padre Gregorio, sin embargo la diócesis de Chilpancingo, capital del conflictivo estado de Guerrero, no reportó hasta la noche de Navidad la desaparición del sacerdote, porque nadie ha exigido rescate por su vida y esperaban su retorno.
#Altamirano #Guerrero Un grupo armado ingreso al seminario y se llevó a el cura Gregorio López Gorostieta pic.twitter.com/le5yOMXdgf
— El Mañana de Valles (@elmananavalles) December 24, 2014
El organismo de la iglesia católica pidió a sus captores que liberaran al "Padre Goyito", en un mensaje firmado por el obispo de Ciudad Altamirano, Maximino Martínez.
El seminario católico de Altamirano, se encuentra en las faldas del cerro Chuperio, a unos 350 km al oeste, alejado de la zona urbana.
En el estado de Guerrero ocurrió hace casi tres meses un ataque por parte de policías municipales y narcotraficantes confabulados con el alcalde de la ciudad de Iguala contra estudiantes de magisterio rural, saldado con seis muerto y 43 desaparecidos, de los cuales uno ha sido identificado, tras el hallazgo de 17 restos humanos calcinados.
El secuestro ocurre mientras que en esa región se despliega un operativo donde la seguridad está bajo control del Ejército y la Policía Federal, en la llamada Tierra Caliente, fronteriza con el estado de Michoacán, otra zona azotada por mafias de narcotraficantes.
A mediados de noviembre, los restos de un religioso católico de Uganda desaparecido en México fueron identificados entre los cadáveres hallados en fosas clandestinas, durante la búsqueda de los 43 estudiantes desaparecidos en Guerrero.
El sacerdote John Ssenyondo había sido reportado como desaparecido en abril por la diócesis católica que sirve a la capital de Guerrero, Chilpancingo.