"El Grand Princess procederá al puerto de Oakland el domingo [8 de marzo] para comenzar a desembarcar a los huéspedes que requieren tratamiento médico agudo y hospitalización", tuiteó la compañía citando las noticias recibidas de organismos de emergencia del estado y locales.
#GrandPrincess Update: We have received word from state and local response operations that Grand Princess will proceed to the Port of Oakland on Sunday to begin disembarking guests who require acute medical treatment and hospitalization.
— Princess Cruises (@PrincessCruises) March 8, 2020
Según la empresa, "el desembarco continuará el lunes [9 de marzo] para otros huéspedes".
Más tarde, Princess Cruises aclaró que "el plan logístico fue revisado por las autoridades estatales y federales y el barco no atracará en Oakland el domingo [8 de marzo]", sino "el lunes [9 de marzo], a una hora por determinar".
#GrandPrincess Update: The logistics plan went into further review by the state and federal authorities and the ship will not berth in Oakland on Sunday. It will now be Monday – time to be determined.
— Princess Cruises (@PrincessCruises) March 8, 2020
Una vez realizados los exámenes de salud, los pasajeros que sean residentes de California se trasladarán a un centro operado por el gobierno federal en California para pruebas y aislamiento, mientras que los demás serán trasladados a instalaciones en otros estados de EEUU.
"La tripulación será puesta en cuarentena y tratada a bordo del barco", añadió la compañía.
Según los informes, unos 2.500 pasajeros están en el barco y un portavoz de la compañía dijo al Sputnik que cuatro rusos están entre la tripulación.
Otro crucero de esta naviera, el Diamond Princess, que partió de Yokohama el 20 de enero con más de 3.700 personas a bordo, se vio obligado a regresar el 3 de febrero a este puerto japonés y fue puesto en cuarentena después de que se desvelara que un pasajero que se bajó en Hong Kong tenía el coronavirus.
A nivel global, el coronavirus ya infectó a más de 106.000 personas en un centenar de países y provocó unas 3.600 muertes, la aplastante mayoría en la China continental. Más de 60.000 personas se recuperaron de la infección.