"La RCMP, creo que en una búsqueda muy apropiada de menos confrontación y con el objetivo de mantener la paz, ha acordado continuar sirviendo al área pero ubicando a su gente en un pueblo cercano, lo cual es totalmente su decisión, pero creo que es la correcta, afirmó el funcionario.
El Gobierno canadiense ha expresado el deseo de reunirse con los líderes indígenas; sin embargo los jefes de los pueblos originarios aún no se han puesto a disposición, según dijo el primer ministro.
Los jefes comunitarios, un título transmitido de generación en generación, de la Primera Nación de Wet"suwet"en, han indicado que el retiro del personal de las fuerzas del orden público de sus tierras es una de las condiciones para una reunión con el ministro de Servicios Indígenas, Marc Miller.
Las protestas comenzaron el 6 de febrero en respuesta a una operación de la RCMP para hacer cumplir una orden judicial contra aquellos que interfieren con el proyecto del gasoducto Coastal GasLink (CGL, por sus siglas en inglés).
Las manifestaciones se iniciaron en el área metropolitana de Vancouver (oeste), pero luego de una ola de arrestos en la Columbia Británica en la que se detuvieron a más de 80 manifestantes, la protesta se extendió a otras partes del país, incluyendo la provincia de Ontario (sureste), donde un grupo de indígenas cerró el corredor ferroviario más concurrido del país, que une las ciudades de Toronto y Montreal.