"No lo creo. No, no creo que los israelíes nos estuvieran espiando. Realmente me resultaría difícil de creer", respondió Trump.
Los medios informaron que, según tres exfuncionarios estadounidenses, agentes israelíes probablemente plantaron dispositivos de vigilancia de teléfonos celulares cerca de la Casa Blanca y varios otros lugares en Washington para espiar a Trump.
Los dispositivos de espionaje se encontraron hace aproximadamente dos años, pero no se atribuyeron a entidades específicas, informó la publicación Politico.
Funcionarios del Departamento de Seguridad Interior compartieron sus hallazgos con las agencias estadounidenses relevantes en 2018, lo que provocó que la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) lanzara su propia investigación.
Los funcionarios declararon que el Gobierno no reaccionó a ese comportamiento de Israel, dejando a los perpetradores impunes.
Elad Strohmayer, el portavoz de la embajada de Israel en EEUU, refutó todas las acusaciones sobre la colocación de dispositivos espías en Washington.