"Es el segundo mexicano que fallece este año tras ser detenido por la patrulla fronteriza y su muerte debe ser esclarecida", dijo vía telefónica desde Chicago el portavoz de la organización, integrante de la Coalición por los Derechos Políticos de los Mexicanos en el Exterior.
Sin embargo, Arango asegura que el récord del CBP y de los agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés) "es una historia de maltrato de la patrulla fronteriza, en particular contra niños, que son indefensos y no pueden expresar cómo se sienten".
Los defensores de migrantes estiman que los agentes fronterizos y de aduanas "suelen actuar con agresividad con los inmigrantes, tanto la patrulla fronteriza como los agentes del ICE".
Además: Gobierno de López Obrador lamenta la muerte de un migrante mexicano en Texas
"No actúan con precaución ni cuidados en esos tipo de arrestos, no atienden sus condiciones y muchas veces los tratan sin respetar sus derechos humanos en los centros de detención", afirmó Arango.
"Es lamentable que la cancillería no se haya pronunciado a esta hora ante un evento de esta naturaleza, es otra muerte de un migrante mexicano en poder de la patrulla fronteriza, que suele operar sin códigos de transparencia que permita evaluar sus acciones", puntualizó.
La Alianza por Derechos de Inmigrantes Migrantes de Chicago realiza actividades de defensa de los derechos de los niños en los centros de detención en el Estado de Illinois, que junto con otras organizaciones ofrecen custodia y denuncian las quejas de maltratos contra los migrantes.
Asimismo se coordina con organizaciones mexicanas que apoyan a migrantes, como el refugio Hermanos en el Camino fundado por el sacerdote Alejandro Solalinde, asesor gubernamental en la materia.
Más aquí: Guatemala expresa apoyo a familias de los 23 migrantes muertos en accidente en México
El hombre fue examinado y enviado al hospital con síntomas similares a la gripe, pero sufrió insuficiencia hepática y renal y falleció; las autoridades de inmigración dijeron que investigaban las circunstancias de su muerte.
El 19 de febrero murió un inmigrante mexicano de 45 años tras cruzar de manera ilegal a EEUU y ser detenido por la CBP, mientras que en diciembre fallecieron una niña y un niño de origen guatemalteco.
