"Pedir que los solicitantes de asilo se queden en México es abiertamente ilegal", dijo en un comunicado Kennji Kizuka, analista de políticas del área de Protección a Refugiados de esa organización.
"Esta es otra instancia en la que el presidente (de EEUU, Donald Trump) intenta unilateralmente reescribir las leyes aprobadas por el Congreso", añadió.
Kizuka, en tanto, sostuvo que México no es un lugar seguro para aquellas personas que buscan protección, dado que son el blanco preferido de traficantes y secuestradores.
La activista añadió que el anunció de EEUU llega unos días después de que dos adolescentes hondureños que integraban la caravana migrante fueran asesinados en la ciudad mexicana de Tijuana, fronteriza con EEUU.
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Trump, "frustrado por su propia incapacidad para conseguir financiación para un muro en la frontera, está ahora tratando desesperadamente de hacer puntos a nivel político poniendo en riesgo la vida de los refugiados y destruyendo las leyes de nuestra nación", dijo Kizuka.
Nielsen, en tanto, dijo que aquellos que quieren hacer trampa entrando a EEUU ilegalmente ya no van a poder desaparecer dentro del país, ausentándose incluso de las audiencias.
Con esta política, añadió, aquellos que soliciten asilo y sean detenidos, esperarán en México la decisión de la corte.
