El nuevo tratado, firmado en el marco de la Cumbre del G20 y luego de más de año y medio de negociaciones, "ha creado un escenario inmejorable para comenzar el nuevo Gobierno del futuro presidente López Obrador", dijo su correligionario del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena, izquierda), secretario de la Comisión de Estudios Legislativos del Senado.
"En principio, nos parece un tratado apropiado, habrá que revisarlo en el Senado para su eventual ratificación", dijo el también integrante de las comisiones legislativas de Energía y Justicia.
Entre los aspectos que deben considerase es que para modernizar el antiguo Tratado de Libre Comercio de América del Norte, vigente desde 1994, "hicimos concesiones en la industria automotriz y en materias relacionadas con el campo, muy complejas pero necesarias", apuntó el también integrante de las comisiones de Comunicaciones y Transporte.
"Tenemos una gran expectativa ante la llegada del nuevo Gobierno, porque será un cambio de régimen político en el que la situación del país irá cambiando poco a poco", anticipó.
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Uno de los principales retos de la nueva administración será "acabar con la corrupción, lograr que la práctica de gobernar deje de ser un negocio y se respete la legalidad", dijo el senador.
Liderazgo regional
Esa declaración está en línea con lo comprometido por López Obrador, en busca de un retorno a los orígenes de la llamada Doctrina Estrada, que guio la diplomacia mexicana en el siglo XX.
"Con esos principios, el liderazgo del presidente entrante buscará también que los países de América del Norte enfrenten el problema de la migración hacia EEUU", de población centroamericana que cruza territorio mexicano, expuso el legislador.
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La propuesta de cooperación y desarrollo de unos 20.000 millones de dólares que propone el futuro canciller Marcelo Ebrard "consiste en impulsar un programa para la gente humilde de Centroamérica y el Caribe", expuso el legislador.
En la agenda internacional de López Obrador y de la bancada oficialista "el tema del respeto a nuestros migrantes es el punto más importante", enfatizo Pérez Cuéllar.
En esa negociación internacional el Gobierno del presidente Donald Trump "debería reconocer que la migración ha sido un muy buen negocio para los estadounidenses", aseguro al describir las anteriores oleadas históricas de mexicanos, que ahora han cesado.
Gracias a esos movimientos regionales de fuerza de trabajo, "la economía estadounidense muchas veces se ha fortalecido con el esfuerzo de millones de mexicanos", subrayó el legislador.
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A esa masiva fuerza laboral "no se le ha pagado lo justo; ha sido un beneficio para EEUU contar con lo mejor de una buena mano de obra, que le ha permitido a muchas empresas crecer", puntualizó.
La ceremonia de toma de posesión de López Obrador se realizará este sábado para dar comienzo a su mandato de seis años, hasta diciembre de 2024.