"La revocación del pase de prensa de la Casa Blanca del señor Acosta, especialmente por motivos inventados, es un ataque absoluto a la libertad de prensa. Esta medida severa, combinada con el trato del presidente a varios otros estimados reporteros de la Casa Blanca, es inaceptable dado el ambiente ya hostil para los periodistas en EEUU", dijo la directora de la oficina de RSF para Norteamérica, Margaux Ewen.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, le quitó el pase de prensa de Acosta después de una conferencia del presidente Donald Trump el miércoles porque el periodista "puso sus manos sobre" una asistente de la Casa Blanca que trató de quitarle el micrófono.
RSF dijo que Sanders también compartió un video del incidente que fue manipulado para que Acosta pareciera agresivo.
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La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca también calificó de inaceptable la decisión de revocar las credenciales de Acosta e instó a la Casa Blanca a revertir inmediatamente lo que dijo que era una acción débil equivocada.