"El hecho de que Trump quiera rescindir el acuerdo significa que está evaluando desplegar nuevos misiles, lo que daría una nueva dimensión a la carrera armamentista", dijo De Brabander a Sputnik.
"El Tratado INF sobre misiles redujo la probabilidad de una guerra nuclear en Europa, pero se trata de misiles que representan una amenaza para los países europeos, incluida Rusia, y no para Estados Unidos", indicó el experto.
De Brabander recordó que EEUU abandonó unilateralmente en 2002 el Tratado sobre Misiles Balísticos (ABM) y "desde entonces trabaja en el desarrollo del escudo antimisiles, percibido por Moscú como amenaza".
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Estados Unidos —apuntó— además rechaza ratificar el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares y se pronuncia en contra de otro acuerdo que prohíbe desplegar armas en el espacio ultraterrestre.
"Trump tampoco apoya la prolongación del nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START) que estará en vigor hasta el año 2021", agregó el experto.
El 20 de octubre, el presidente de EEUU, Donald Trump, declaró que su país abandonaría el Tratado de Eliminación de Misiles de Corto y Medio Alcance (Tratado INF), alegando violaciones del acuerdo por parte de Rusia.
Moscú declaró que esas afirmaciones provocan preocupación, ya que la medida hará que el mundo se vuelva más peligroso.
El Tratado INF, firmado por Washington y Moscú en 1987, no tiene fecha de caducidad y prohíbe a las partes disponer de misiles balísticos terrestres o misiles de crucero con un radio de acción de entre los 500 y los 5.500 kilómetros.
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