"Los principales riesgos para la estabilidad del sistema financiero mexicano continúan siendo: un escalamiento de las tensiones comerciales y el endurecimiento de las condiciones financieras como resultado de un incremento en las tasas de interés en EEUU a un ritmo mayor al esperado", explicó el Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero (CESF).
Asimismo, el consejo estima que existen amenazas por un incremento de los "desbalances macroeconómicos que presentan algunas economías emergentes".
La suma de esos factores podría "generar contagio y una desaceleración del crecimiento mundial antes de lo anticipado", dice el documento emitido tras la sesión del consejo.
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En cambio, el avance en las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) "es un elemento positivo aunque éstas aún no han concluido", agrega el texto.
Macroeconomía
Las principales autoridades financieras que conforman el organismo dieron seguimiento a las "medidas para mitigar el riesgo de ataques cibernéticos" y revisaron los "instrumentos macro prudenciales" disponibles en México.
Las autoridades estiman que las acciones de política económica "han contribuido a la resiliencia del entorno macroeconómico".
La postura de política monetaria del banco central está orientada a "contribuir al anclaje de las expectativas de inflación de mediano y largo plazo", con una meta de 3% (+/- 1%) que podría alcanzarse a finales de 2019.
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Esa política monetaria, que mantiene sin cambios la tasa de interés en 7,5%, desde el 8 de febrero pasado, también "ha inducido un incremento del ahorro financiero del sector privado", indica el informe.
Aunado a esta política del banco central, "la disciplina fiscal ha reforzado la confianza sobre la sostenibilidad fiscal de nuestro país", indica el consejo.